QUÉ ES LA VERDAD, MEJOR AÚN, A QUÉ SABE LA VERDAD

(Por Rosa María Ordaz)

* Siempre descubriremos la verdad en la vida y la vida en la verdad (ver entrevista y trailer al final de mi escrito)

En mi entrevista con Juan Manuel Cotelo, director, productor y guionista de la valiosa obra, la cual refiero en este artículo, gracias a él, a través de sus palabras, conocí el alma de esta película y lo concluí en la hondura de mi escrito. Ver en You Tube éxito total en Europa y América película “Tengamos la fiesta en paz”

¿Ha escuchado usted esta expresión? Qué es la verdad, hoy, más que reflexionar o entender qué es la realidad  he meditado que lo más importante, es saber descubrir, a qué sabe la verdad, resaltarla desde esta perspectiva, describirla con todos sus beneficios, atributos, poder etc. También es vital, me atrevo a decir de vida o muerte, comparar el sabor y el resultado de, a qué sabe la mentira. Al confrontar ambos significados vamos a tener un ejemplo y definición muy precisa de una y otra; evitaremos ser engañados por las trampas, cobardías y bajezas de la falsedad, la cual nos envuelve, invade e irrumpe continuamente por medio de modas, tecnología y más. Sorpréndase y déjese cautivar por mi artículo.

Tuve la oportunidad de ver en Cinemex de plaza mayor la película “Tengamos la Fiesta en Paz”, del cineasta español Juan Manuel Cotelo, se estrenó el 1 de diciembre en 18 países, actualmente se extiende a más continentes. Gracias a la fuerza de un mensaje lleno de esperanza para la familia y la riqueza de sus contenidos; esta valiosa obra, aún continua en cartelera a nivel nacional e internacional. Sugiero ver esta historia a estilo de comedia, que nos hace reír, llorar, aplaudir, amar, perdonar y bailar en el corazón. Hoy, todavía no es tarde, para darte el mayor regalo a ti, y a tu familia, esta película es ¡Imperdible! Busca horarios y salas en tu teléfono.

La cinta, evidencia el poder y el sabor a muerte de la mentira en los matrimonios, los hijos junto con el entorno en el que se encuentran atrapados, encadenados, por sus orgullos, rencores, heridas; sumado a los efectos implacables y destructivos del engaño en el que viven los protagonistas de este largometraje; lastimándose continuamente con sus palabras, actos, acciones; por su total  ignorancia de Dios, al cual excluyeron de sus vidas; aunado al analfabetismo del poder de las virtudes que salvaguardan de la agonía «muerte» en la que ya se encuentran como familia.

Odio, ira, victimismo, falta de perdón, violencia verbal, depresión, culpa, miedo, injusticia, manipulación, impaciencia, peligro de adulterio, chantaje, comparaciones; exceso de trabajo, mucho dolor en el corazón de los hijos y más son los antivalores que aprisionaron a la familia, protagonista de esta valiosa historia “Tengamos la Fiesta en Paz”. Cada miembro de este clan, comenzando por los padres, perdieron su identidad, en ello la dirección de su vida, su auténtica responsabilidad espiritual como progenitores. Los párrafos anteriores, detallan el amargo sabor a muerte de la MENTIRA, además de las consecuencias de dejarse seducir, caer y vivir en ella.

Por otra parte, apunté la palabra espiritual, porque somos verdaderamente padres, personas, hijos; cuando hacemos realidad en el corazón, los excelentísimos preceptos del creador (los diez mandamientos) y las exquisitas virtudes cardinales y teologales de Dios.

Aquí, está el esplendoroso manual de vida que nos orienta a la perfección, bienestar humano en toda la dimensión de la palabra. Escribí el calificativo exquisitas, debido a la hermosura de los resultados; de las dignidades mencionadas en nosotros, las cuales confirman el título de mi artículo. Las virtudes simbólicamente embellecen, sanan, rejuvenecen, nos hacen inquebrantables ante el dolor, la mentira, desaliento, decepción; son como ángeles que nos cuidan y dirigen a la grandeza del alma; a reencontrar la paz interior, la prudencia, paciencia, comprensión, ¡El perdón! La esperanza, el gozo, la armonía; la fortaleza para resucitar el amor destruido, la humildad para reconocer, para reconquistarnos espiritualmente como personas, esposos, sanarnos como hijos, seres humanos que somos, pero ante todo como familia. A que más sabe la verdad; a salud, equilibrio psicológico, físico, biológico, social. ¡Siempre descubriremos la verdad en la vida y la vida en la verdad! Dios es verdad, vida, bondad, belleza, gloria, bien y paz para el corazón. Pidamos perdón al Creador, hagámoslo realidad en nuestra vida  y «tengamos siempre la fiesta en paz» Mayores informes www.grandezaydignidad.org , You Tube rosa María Ordaz programa “Testigos de la Verdad” por “Mundo Católico, IVOOX Rosa María Ordaz, Instagram rosa_maria_ordaz, Twiter @RosamariaOrdaz5, Spotify Rosa María Ordaz, Facebook Rosa María Julia Ordaz

 

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